Hoy se celebra el famoso Black Friday, una campaña de descuentos en muchos productos que busca principalmente incrementar las ventas antes de las Navidades.
Pero no podemos olvidar que las compras masivas centralizadas en este día suponen un considerable impacto para nuestro entorno y es con el objetivo de frenar este impacto como nació el Green Friday.
Las consecuencias negativas que tiene el Black Friday para la sostenibilidad y la protección del medio ambiente son enormes. Por un lado, para poder vender con descuento las marcas ahorran en costes de producción, lo que se traduce en selección de materiales menos sostenibles y difíciles de reciclar cuando termina su vida útil. Por otro, las compras compulsivas llevan a un exceso de consumo y una mayor generación de desechos. La gestión de estos desechos no está resuelta y provoca un impacto medioambiental inmenso
Este movimiento busca fomentar un consumo responsable y sostenible con nuestro entorno. Y ya son muchas las marcas que han decidido ir de la mano de este día.
De este modo, el objetivo del Green Friday es «llamar la atención de la sociedad sobre el derroche energético que supone el uso de la mayoría de electrodomésticos, además de sensibilizar sobre la importancia de reducir, reutilizar y reciclar»,
Green Friday promueve unas fiestas «slow», con pequeñas compras en negocios locales, apoyando el pequeño comercio, con regalos hechos a mano, las ventas de segunda mano o el reciclaje.
Hay varias formas de celebrar el Green Friday 2022 y si eres de los que creen que otro mundo es posible, serás de los que quiere promover un nuevo tipo de consumo. ¿Cómo puedes hacerlo?
- Una de ellas es hacer compras en negocios de tu barrio, en tiendas pequeñas y apoyando el pequeño comercio. También puedes apoyar a artistas, ilustradores, diseñadores…o amigos que hayan formado su propio negocio para apoyarles.
- Resistirte a los descuentos agresivos y no comprar nada en Black Friday.
- Buscar marcas que tienen iniciativas Green Friday y comprar sus productos a modo de apoyo.
- Pensar antes de comprar: ¿realmente lo necesito? ¿si no estuviera rebajado, lo compraría?
- Ver si puedes arreglar los productos estropeados antes de desecharlos.
- Comprar productos de segunda mano; lo puedes hacer en plataformas como Vinted, Zalando o Veepee.
- Comprar marcas artesanales y apostar por el comercio de proximidad.
- Trasladar el mensaje a tu entorno para ayudar a difundirlo
