Como todos sabemos, no todos los departamentos que participan en una producción publicitaria deben prestar la misma atención a los mismos aspectos cuando se trata de la sostenibilidad. Unos deben preocuparse más por el consumo de ciertas materias primas, la reutilización de materiales y el cuidado de sus respectivos residuos, etc…
Por este motivo hemos decidido enfocar el artículo de esta semana a uno de los departamentos que más esfuerzos y dedicación destinan a implantar hábitos y costumbres sostenibles en su rutina laboral, el departamento de vestuario.
Para conocer de primera mano cómo lo hacen para disminuir el impacto producido, hablamos con Ana Morera, una profesional con 28 años de experiencia como estilista y fundadora de Vestida Para Rodar y Costume BCN, una plataforma de alquiler de ropa para rodajes fundada en 2004. Esto demuestra que desde siempre ha sentido cierto interés por comprar lo menos posible y alquilar todo lo que sea posible, una de sus principales filosofías a la hora de trabajar.
Ana Morera
Pero esto a veces no es suficiente, ya que como ella misma dice, “el sector de la moda tiene mucho impacto en el medioambiente debido al fast fashion, que implica una moda rápida y cambiante donde se exige una rotación de colecciones a precios muy bajos y esto hace que el impacto sea terrible”. Por eso siempre busca nuevas formas de aprender con cada rodaje y con los profesionales con los que trabaja.
Ella misma nos confiesa que es consciente del problema actual, por eso es tan importante que cada uno aporte su propia semilla, ya que aunque en la actualidad no nos afecte de forma directa, está segura de que “las próximas generaciones si lo harán, por eso tenemos que empezar a pensar y actuar a largo plazo”.
Su principal motivación es ver que cada vez hay más profesionales que están concienciados con la causa, así como las productoras y las nuevas incorporaciones a las plantillas, quienes están totalmente concienciados con el uso de materiales reciclables o productos más respetuosos con el medio ambiente. 
A pesar del esfuerzo que tanto Ana como los profesionales de este sector hacen, siguen luchando por aumentar el número de showrooms y participantes en el alquiler de prendas, puesto que es la forma en la que más se aprecia el impacto que hay detrás de la compra continua de vestuario. El ahorro de tiempo, dinero y recursos han convencido por completo a muchos de los estilistas que hoy en día apuestan por la moda circular y el alquiler de prendas. ¿Y tú, a qué esperas para unirte al cambio?
Por Ernesto Torrijos.
