Las productoras asociadas Grayskull y Primo demuestran que la creatividad no entiende de límites. Desde la emoción salada de Rabo de Peixe hasta el vértigo psicológico de Vieja Loca, ambas confirman que las historias más poderosas nacen cuando la producción se convierte en arte.
GRAYSKULL — Historias que nacen del mar y vuelven a él
La ficción vuelve a respirar con “Rabo de Peixe”, la serie de Netflix que este viernes estrena su segunda temporada bajo la mirada del director y showrunner Augusto de Fraga, de la productora asociada Grayskull. Un regreso que trasciende lo narrativo: es el reflejo de una manera de entender la creación desde la verdad, la emoción y la raíz.
Durante años, Fraga ha llevado la sensibilidad de la producción publicitaria al lenguaje de la ficción, construyendo universos donde la estética y la humanidad se entrelazan. “Rabo de Peixe” no solo continúa una historia, sino que reafirma cómo las productoras asociadas a la APCP son capaces de expandir su talento más allá de los límites del spot, habitando la frontera entre arte, industria y mirada autoral.
Como el propio mar que da nombre a la serie, la obra de Grayskull nos recuerda que las buenas historias siempre vuelven a la orilla: distintas, más hondas, pero con la misma fuerza que las hizo partir.
PRIMO — El miedo como espejo: “Vieja Loca” sacude Sitges
Desde la oscuridad que habita en lo cotidiano, la productora asociada Primo nos entrega “Vieja Loca”, la nueva película de Martín Mauregui, presentada el pasado 9 de octubre en el Festival de Sitges. Protagonizada por Carmen Maura y Daniel Hendler, y producida junto a J.A. Bayona, Belén Atienza, Ramón Campos y Gabriela Carcova, la cinta se adentra en el terror psicológico para hablarnos, en realidad, de la fragilidad humana.
La película es también el fruto de una coproducción internacional entre España, Argentina y Estados Unidos, con la colaboración de Amazon España, demostrando que las productoras de la APCP no solo lideran el ámbito publicitario, sino que también son parte activa de los nuevos lenguajes del cine contemporáneo.
El estreno, retransmitido en directo a más de 70 cines de toda España, fue una celebración de la unión entre tecnología, arte y emoción. Y cuando Carmen Maura recibió el Gran Premio Honorífico, no fue solo un reconocimiento a su carrera, sino también a la valentía de quienes siguen haciendo del cine un espacio para mirar de frente aquello que más tememos.
Porque, al final, como demuestra Primo, crear es enfrentarse a la locura —la que asusta, la que inspira, y la que nos recuerda que seguimos vivos.
